Mazaleón_Ermita

La ribera del río Matarraña separa el núcleo urbano de Mazaleón de su ermita, colocada en una gran colina desde la que se divisa buena parte de su entorno. La ermita de San Cristóbal se eleva en una ubicación estratégica y es una de las ermitas más grandes del Matarraña.

Sus grandes dimensiones y su presencia otorgan a este templo parroquial un carácter imponente debido también a sus paredes de sillería.

La ermita tiene planta de cruz latina, cubierta por una bóveda de medio cañón con lunetos y su interior destaca por las pinturas que decoran su cúpula central. Aun así, la parte más imponente de esta ermita se encuentra en el exterior. Su gran portada muestra un relieve  sobre el arco de medio punto de la entrada y una pequeña espadaña en la parte superior. Desde la lejanía, se observa el gran cimborrio octogonal sobre la cúpula de crucero que caracteriza este edificio.

Adosada a la ermita encontramos la casa del ermitaño, que se construyó con el fin de albergar a la persona encargada del mantenimiento y de la limpieza del templo en la antigüedad. Su fachada, aunque de características sencillas, cuenta con tres plantas.

Los vecinos de Mazaleón celebran cada mes de julio una romería hasta esta ermita para celebrar el día de San Cristóbal.