Mas de las Matas debe su nombre a la familia Mata; a eso unimos el hecho de que la palabra “mas” significa asentamiento y conjugamos Mas de la Mata o el asentamiento de la familia Mata, que es el núcleo urbano donde hoy residen los masinos. Los primeros moradores de la localidad se asentaron en Kamarón, en el entorno donde hoy está ubicada la ermita de Santa Flora. El castillo de Kamaron fue reconquistado por Alfonso II en el siglo XII, quien donó la población a la Orden del Temple y posteriormente pasaría a manos de la Orden de San Juan. Hasta el año 1611 no obtendrá la independencia de La Ginebrosa, efeméride que hoy se conoce como La Concordia.

De su patrimonio destaca la iglesia Parroquial de San Sebastián con su enorme torre campanario que, con sus 64 metros de altura toca el cielo con su remate en cruz, no en vano es la más alta de toda la provincia. Construida en el siglo XVIII fue realizada en piedra sillar y mampostería aunque sufrió numerosas pérdidas tras la Guerra Carlista y la Guerra Civil Española.

Siguiendo con el patrimonio religioso encontramos la ermita de Santa Flora, mezcla de estilo barroco y neoclásico por sus diferentes fases compositivas. La misma se comenzó a construir a mediados de siglo XVII con sendas transformaciones en los siglos XIX y XX. En el entorno de la misma hay un mirador con fantásticas vistas del Mas. Además cuenta a sus pies con un calvario natural que podemos ver si accedemos caminando.

Además existe otra ermita, la de Santa Bárbara, pero su estado actual es de ruina.

En el centro de la localidad nos toparemos de lleno con La Casa Consistorial, edificio renacentista en el que destacan los tres arcos que forman la lonja. Siguiendo por la Calle Mayor llegaremos a la Casa Zárate, casa solariega del siglo XVIII. Otra construcción privada es la Casa Feliu que hoy alberga el Museo de Mas de las Matas y subsede de Dinópolis. En él reside una exposición permanente cuyo título es "Agua, Tiempo y Tierra" y su temática principal gira en torno al estudio de fósiles marinos y rocas volcánicas. A través de estos dos restos se  interpretan los diferentes y profundos cambios geológicos de la zona durante la etapa del Jurásico y del Cretácico.

Mas de las Matas es un pueblo eminentemente agrícola y por ello el agua es un bien preciado. La localidad cuenta con varias obras hidráulicas de interés como el sistema de riego musulmán del siglo VIII, la acequia mayor datada en el siglo XVIII o los dos lavaderos del municipio, el del Brazal y el de las Lunas. También posee un interesante molino aceitero.

Una fecha señalada en el calendario por los vecinos es la fecha en que se conmemora "El Regreso del Comendador" a la localidad, que la converte todo un fin de semana en un escenario medieval con numerosas representaciones donde participa gran cantidad de gente y que acoge a numerosos visitantes. Esta recreación pertenece a la Asociación Española de Recreaciones Históricas y tiene lugar en el mes de septiembre.

Las fiestas patronales se celebran en honor a San Agustín, el cuarto fin de semana de agosto.