Monroyo_Ayuntamiento
Sin duda alguna uno de los edificios más significativos y emblemáticos de Monroyo es su ayuntamiento. Este edificio, sus alrededores y construcciones adjuntas despiertan el interés de cualquiera que pueda acercarse a él. Su singularidad comienza por su acceso, al que se abre una gran escalinata de la calle Empedrada y que lo conecta directamente con la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. En lo alto de las escaleras, se enclava este edificio de estilo renacentista destacado por la lonja de su parte inferior. Esta, junto con los soportales de los edificios de enfrente, resalta la belleza popular de este tipo de construcciones sustentadas por columnas de piedra.
El edificio del ayuntamiento se erigió durante dos etapas constructivas con tan solo seis años de diferencia. Hoy cuenta con tres plantas que dan acceso al entramado de calles del núcleo poblacional y que responden al desnivel con el que cuenta la localidad. Así pues, cada planta, cuenta con un acceso a través de una calle diferente. El piso superior se dedica a funcionalidades ajenas a las dependencias municipales, que se encuentran en la segunda planta. La parte inferior está abierta al exterior a través de esta lonja de tres grandes arcos. La fachada es de decoración más bien sobria y destaca por el alero de piedra que se abre en la parte inferior.
Entre sus arcos se encuentra la entrada a la antigua cárcel, incluida en la Ruta de las Cárceles del Matarraña que ensalza la belleza de estos calabozos que permanecen prácticamente intactos a pesar del paso de los años. La cárcel de Monroyo cuenta con un total de tres celdas que acogieron a prisioneros hasta mediados del siglo XX.
Junto al ayuntamiento, encontramos un bello edificio construido en piedra de sillar que concuerda al completo con el entramado de soportales gracias a los arcos que se abren en su fachada.