Lavadero La Cañada de Verich
La Cañada de Verich acoge en el centro del municipio un pequeño y curioso lavadero que fue restaurado como elemento patrimonial. Sus escasas dimensiones se deben a que la población no tiene numerosos habitantes y por lo tanto no hacía falta tener un gran tamaño. A diferencia de otros municipios que los mismos estaban en las afueras de la población este curiosamente se sitúa en una de las calles principales que la recorren. Al mismo se accede bajando unas pequeñas escaleras desde la plaza donde se sitúa. De forma poligonal está cobijado en la parte desde donde lavar la ropa por un techo con teja para protegerlo de la lluvia. Recordemos que anteriormente a estos lavaderos públicos con acceso a la red de agua las mujeres en muchos municipios debían de acercarse hasta las orillas de los ríos porque en a las casas no llegaba el agua potable. Una dura vida que fue mejorando con el paso de los años, aunque muchas de nuestras mayores, encargadas de realizar estas tareas cuentan lo duro que se hacía usar estos lavaderos en pleno invierno por la baja temperatura del agua.