Nevera Crespo de Calanda

La nevera de Calanda perteneciente a la Ruta de las Bóvedas del Frío está directamente ligada a la familia Crespo de Calanda. Es en el año 1861 cuando Juan José Crespo compra esta construcción posibilitada por la desamortización de los bienes públicos de Madoz del año 1855.

Uno de sus sucesores Eloy Crespo Galve será el artífice de que está no se derruyera, ya que fue un incondicional por mantener la nevera y que posteriormente donó al Ayuntamiento de Calanda. La misma está formada por un espacio central donde podemos ver como se disponían las distintas capas de nieve. A su vez se crearon dos ramificaciones laterales que hoy se utilizan para documentar la misma a través de un audiovisual y en la otra los distintos usos que podía tener el almacenamiento de la nieve.

La superficie de la Nevera Crespo de Calanda constaba de 380 metros con un diámetro de 3,33 metros y una profundidad de 7,20 metros. De forma cilíndrica la misma está fabricada con mampostería repuntada con argamasa de cal.